Capitulo 1: Soñar y admirar
Primer día de clases, soñé con esta situación un millón de veces, pero no imagine que esto me perseguiría tanto tiempo. Ya han pasado cuatro años, y aun no puedo dejar de observarla, y no paro de preguntarme si es que el mismo atardecer dejara un día de envidiar el matiz rojizo en su cabello, o si en algún momento de una existencia pasada algún artista griego llego a esculpir tan maravilloso perfil. No paro de observar, de sentir, de soñar. Solo me acerco sin intención, y me es imposible calcar las situaciones tal como las veo en mi mente.
Capitulo 2: Sin miedo de hablar
Duele imaginarla con otros, el mundo es una puta mierda, sí que lo es, pero ya estoy aquí, no quiero temer. Hemos hablado, intercambiado pensamientos, se siente como si tuviera un sol en mi pecho. He tocado su mano, su piel es suave, como la parte trasera de una cuchara.
Hoy es el día, se lo diré, pero no esperare respuesta. Tengo miedo, pero me doy fuerza frente al espejo que me observa y no deja escapar ningún detalle de mi rostro casi pálido.
Solo me acerque hablamos un momento y se lo dije, al instante sentí que perdí mi hombría frente a ella, me lamente, falle. Al menos es Julio, nos dejaremos de ver un tiempo, no me vera perder mi confianza en trozos pequeños…
Capitulo 3: Vacaciones
Vacaciones, creo que nunca las espere tanto como ahora. Me aleje de la cabaña, quiero estar solo, pensar. Estaba frente a la playa, se acercaba el atardecer, la recordaba. Me senté en la arena. En un momento sentí un suave golpe en la espalda, me gire, pero no había nadie, mire a mi derecha y soñé. Era ella con una dulce expresión en su rostro, me miraba. No lo podía creer, hablamos, nada es como lo imagine. Nos miramos un momento sin hablar, se acerco, me dijo que ella sentía lo mismo. En ese momento supe cómo dar el beso perfecto, moví su cabello detrás de oreja, acaricie su rostro con mis dedos y la bese. Sentí lo indescriptible, luego nos miramos sin hablar, otra vez. Nos levantamos, y sufrí por no entender, me dijo que a pesar de los sentimientos mutuos lo nuestro no era posible, una lagrima bailo por su mejilla, y otra descendió por mi alma. Me beso fugazmente, quise decirle todo, pero las palabras se amontonaron en mi garganta, y ninguna vivió. Me explico que quería irse, se cambiaba de carrera, ame su valor, odie al destino por jamás considerarme.
Capitulo 4: ¿Realidad?
Solo estuvo una última semana, la mejor de todas, fue mía durante 4 días, luego se despidió de todos, excepto de mi. Entre la muchedumbre se marcho, ni siquierapude verla. Me senté en una banca, una de sus amigas se acerco, dijo que mi amada no se despidió para evitar el dolor, se fue por un tumor cerebral inoperable. Me levante, corrí, la alcance en el paradero, la mire, la bese, la ame de nuevo. Ella me miro, acaricio mi rostro, y dijo te amo. Lo nuestro ya no era posible, para ella. Y me lo dijo, se despidió, se alejo. Al verla por última vez lo supe, la amaba, se lo dije.
Capitulo 5: Realidad
Tuve una visita, mi amigo, estaba preocupado. Me pregunto porque ya no voy a clases, pensó que me había sucedido algo, que no me ha visto en dos semanas. Encontró unas hojas en el piso, tenían algo escrito, era la historia de mi amor, y del terrible final inevitable. Me pregunto que como era posible, jamás se dio cuenta. Entonces le explique la realidad,
Le conté que la última vez que vi a mi amor fue en una fiesta, me invitaron, no sabía que ella estaba allí. Ella se presento, no me reconoció, estaba oscuro, en cambio yo como podía no identificarla. La observe horas, la vi gritar, bailar con otros hombres, beber en demasía, quedar en ropa interior parada sobre una mesa, y encerrarse en una habitación con dos sujetos.
Mi amigo escucho, tenía cara de preocupación y pregunto ¿Por qué?, como el sentimiento más puro que había llegado a sentir jamás, podía terminar así. Solo cambie el final de nuestra historia, por mi bien, fui egoísta, pero no soporte la realidad.