Tristeza
Sobre aquella verdad que te hice caminar y no lo permitiste
Tristeza, en el puente
Mi cabeza hecha de lapidas o vértices
Todos resueltos aumentan (ahí pueh en el centro)
Y no me vengas, con tu infinito (a lamerme algo más que la boca)
(¿Pudiera, yo, ser?) X …
Esa costumbre de vanidad que tanto te brota
Cuando, gota a gota, sabes..
A gata
Y mueves tu cuerpo en una danza que no es la mía
Observo entonces desde el perímetro
La inigualable capacidad de morderme y desgarrarme con tu hocico fuera de la atmosfera
Ese don que le dicen
Donde yo te permito entrar por una ventana
Y te quedas, dando vueltas, pasándome tu lomo por la cara
Hasta que recuerdas que tienes otro compromiso
Tristeza
Con los nudos igualitos del que no puede escupir (ahí pueh en el centro)
Y la cara vencida después de tanto dibujar tu espalda.
Antonio el Hipotálamo