buscandome Posted March 13, 2021 Report Share Posted March 13, 2021 LOS ERRORES SE ASUMEN DESDE LA HUMILDAD En mi opinión, todos cometemos “errores” a lo largo de nuestra vida. Son inevitables. Nos suceden demasiadas cosas diferentes y no estamos expresamente preparados para resolverlas. Así que, por esa falta de preparación personal o por falta de atención o por no planear y hacer las cosas del modo adecuado o por las circunstancias que sean… acabamos teniendo “errores”. Personalmente prefiero no utilizar la palabra “error” y poner en su lugar –es más largo pero más adecuado- “proyecto que no salió del modo deseado”. Es una forma de decir lo mismo evitando la incómoda y autodestructiva carga que lleva implícita la palabra “error”. No acertar es una de las posibilidades cuando se toman decisiones y hay que aceptar esta posibilidad y dejarle su espacio por si ocurre, procurando, eso sí, que tenga las mínimas posibilidades de que ocurra, pero si llega a suceder no hay que hacer un drama de ello. A veces es el ego herido en su orgullo el que impide que lo aceptemos sin más y hay que tener mucho cuidado de no darle un protagonismo excesivo porque su inaceptación la vamos a pagar nosotros en forma de malestar, rabia o enojo y, peor aún, hasta somatizándolo. No es el ego sino la humildad quien tiene que hacerse cargo de los desaciertos. No hay que afrontarlos –y aceptarlos rendidos y humillados- desde el despecho sino desde la flexibilidad que proporciona saber y comprender que las decisiones unas veces se toman bien y otras no. La conformidad que nace de la comprensión, la tolerancia que nace de la inteligencia, y la paciencia que nace de la sabiduría, son elementos esenciales para manejarse con los aspectos menos agradables que nos ocurren en la vida. Alterarse, enojarse, encolerizarse, maldecir… son algunas expresiones descontroladas y nada beneficiosas. Así se descarga de algún modo la rabia que se acumula por los desaciertos, pero hay otros modos de hacerlo. Un buen trabajo de Desarrollo Personal evitaría que las emociones naturales ante los contratiempos se conviertan en sentimientos desastrosos. No hay que responder desde el dolor a las adversidades. Más bien hay que hacerlo desde una calma fruto de la observación de otras situaciones similares en las que hemos comprobado que es mejor relativizarlo, quitarle la carga de frustración; lo que hoy parece un momento insuperable en algún momento retornará a ser lo que realmente es: un inconveniente temporal que se resolverá de algún modo. Hay que ser humilde y honesto y reconocer que uno no ha acertado. No pasa nada. Aunque eso implique pérdidas o molestias. No pasa nada. Uno vale más que cualquiera de las adversidades o circunstancias. Éstas pasarán y uno seguirá estando. No es adecuando convertir lo que es sólo un contratiempo en un arma de destrucción personal. Hay que exculparse de los errores y darse ánimos –en vez de castigos- para hacerlo mejor la próxima vez que se presente otra de esas dificultades que no sabemos cómo afrontar. Cada desacierto se merece una revisión objetiva y una reflexión que se conviertan en enseñanzas. Así se aprenden cantidad de cosas. Prueba y error. Aciertos y sus antónimos. Lo peor que puede suceder con un “error” es que no aprendamos de él convirtiéndolo en algo útil y que por ello volvamos a repetirlo. No es lo malo el “error”, lo malo es no aprender con él. Te dejo con tus reflexiones… Francisco de Sales Si le ha gustado este artículo ayúdeme a difundirlo compartiéndolo. Gracias. Link to comment Share on other sites More sharing options...
GEODASOFT Posted March 18, 2021 Report Share Posted March 18, 2021 muy bueno tu mensaje Link to comment Share on other sites More sharing options...
Recommended Posts
Create an account or sign in to comment
You need to be a member in order to leave a comment
Create an account
Sign up for a new account in our community. It's easy!
Register a new accountSign in
Already have an account? Sign in here.
Sign In Now