Jump to content

SOPA y PIPA mueren,pero sigue ACTA.


Recommended Posts

?84

 

Qué es ACTA y cómo afectará tu uso de Internet

 

Cuando el senador estadounidense Lamar Smith retiró el proyecto de ley SOPA (Stop Online Piracy Act) y con su hermana menor, PIPA (Protect IP Act) igualmente en la congeladora, el Internet pareció tomar un momento de respiro. Sin embargo, el entusiasmo podría olvidarse muy pronto: existe un tratado internacional llamado ACTA que se ha estado preparando por lo menos desde 2008, y cuyas consecuencias, de aprobarse en unos días, podrían ser desastrosas.

 

 

¿Qué es ACTA?

ACTA son las siglas de Anti-Counterfeiting Trade Agreement o Acuerdo Comercial contra la Falsificación. Al igual que ocurrió con SOPA, el espíritu de este tratado parece positivo a primera vista: su objetivo es crear un marco legal para la protección de los derechos de propiedad intelectual en todo el mundo. La “falsificación” que pretende prevenir (aunque como veremos, “falsificar” es una palabra que no concuerda con el funcionamiento del Internet) no se limita a software, también abarca bienes físicos, productos, marcas registradas e incluso medicinas.

ACTA es un proyecto para prevenir el contrabando ilegal de propiedad intelectual y física (como medicamentos controlados) a nivel global; la Unión Europea podría dar luz verde al proyecto a finales de esta semana, contando con el apoyo oficial de países como Estados Unidos, Australia, Corea, Nueva Zelanda, México, Jordania, Marruecos, Singapur, los Emiratos Árabes Unidos y Canadá. Se trata de un acuerdo global al que los países pueden unirse de manera voluntaria.

 

Las negociaciones sobre ACTA están muy avanzadas en este momento. Es necesario tener un panorama de su impacto en nuestra relación con el Internet

 

Los primeros borradores datan incluso de 2006, a raíz de reuniones entre Estados Unidos y Japón. Canadá, Suiza y la Unión Europea ingresaron poco después. Los críticos de ACTA no han dejado de remarcar el que la creación de este tratado haya sido encubierta, así como que tampoco tomara en cuenta a la población para desarrollarse. Durante 2008 y 2009 ocurrieron filtraciones que permitieron saber que ACTA tiene cláusulas donde se entiende que los proveedores de servicios de Internet deberán intervenir las comunicaciones de sus usuarios, si se sospecha que alguno está enviando o recibiendo material protegido por derechos de autor. De no hacerlo, los proveedores de servicios de Internet (ISP) podrían enfrentar cargos penales. Esto genera un panorama donde podrían haber claras violaciones a los derechos digitales de los usuarios, así como a la privacidad de las comunicaciones a través de la red.

En 2008, el Parlamento Europeo describió la utilidad y los alcances de ACTA del siguiente modo:

“La proliferación de infracciones contra los derechos de propiedad intelectual supone una amenaza creciente al desarrollo sostenible de la economía mundial. Es un problema de serias consecuencias económicas y sociales. Hoy enfrentamos un gran número de nuevos retos: el peligroso incremento de bienes falsificados (farmacéuticos, comida y bebida, cosméticos o juguetes, autopartes); el auge y velocidad de la reproducción digital; el crecimiento de la importancia del Internet como medio de distribución; y la sofisticación y recursos de los falsificadores internacionales. Todos estos factores han hecho el problema más peligroso y difícil de controlar.”

En esta descripción es evidente el desconocimiento imperante en la ley al igualar el estatuto de productos como un medicamento controlado y una canción en MP3 en términos de falsificación y contrabando. ¿Es que ACTA no ha contado con asesoría especializada en el caso de Internet? De hecho sí: amparados en otro acuerdo internacional sobre transparencia de la información, algunas compañías recibieron copia de los borradores de ACTA, bajo el acuerdo de no darlos a conocer. Las compañías fueron Google, eBay, Intel, Dell, News Corporation, Sony Pictures, Time Warner y Verizon. Se trataba solamente de documentos de carácter informativo: al tratarse de un acuerdo internacional, en realidad no parece haber mucho que la iniciativa privada pueda hacer.

 

El Parlamento Europeo, además de los países del G8, es el principal impulsor de ACTA

 

¿Por qué nadie habló de ACTA?

A través de las redes sociales circularon videos y artículos desde hace un par de años relativos a la naturaleza de esta ley, sin que la gente se manifestara muy consciente de su contenido. Si algún mérito tuvo el escándalo de SOPA fue el de alertar a los usuarios de que este tipo de leyes podría afectarlos no importando su país de residencia. Pero ACTA está en un estado sumamente avanzado de desarrollo; como dijimos, comenzó a ser negociado en privado hace por lo menos 5 años, y sus estatutos preliminares ya fueron aprobados en octubre del año pasado. (El texto de la resolución actual se encuentra en español aquí.)

Al menos leyes como SOPA (así como la llamada "Ley Döring" en México, la “Ley Lleras” en Colombia y otras similares en varios países), permitían que los ciudadanos de los Estados ejercieran su derecho a participar en el desarrollo de la ley escribiendo a congresistas y senadores sobre su desacuerdo para apoyarlos. Pero ACTA es un acuerdo internacional descentralizado (aunque su aprobación o desaprobación recae mayormente en el Parlamento Europeo), que no permite dirigirse a una instancia específica para establecer alguna suerte de diálogo entre los legisladores y la sociedad civil. Ha habido comités de asesoría, pero con poca o nula participación de los más afectados: los usuarios.

 

¿Qué consecuencias tiene para los usuarios?

Nadie puede estar en contra del combate al tráfico de pornografía de menores, ¿cierto? Según datos filtrados de ACTA, en Canadá las autoridades fronterizas ya llevan a cabo revisiones aleatorias en laptops buscando este tipo de materiales. Un usuario común podría estar de acuerdo con esto: después de todo no tenemos nada que ocultar. El problema viene cuando una medida necesaria se convierte en una medida invasiva.

La paranoia aeroportuaria que siguió a los eventos del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York sería un buen ejemplo para ilustrar el funcionamiento de ACTA, sólo que a nivel informático. Así como los pasajeros eran sometidos a exhaustivas revisiones, muchas veces atentando contra su derecho a la privacidad y al trato digno, los dispositivos informáticos podrían ser intervenidos de maneras drásticas.

En pocas palabras, ACTA funcionará así:

  • Solicitará a los Proveedores de Servicios de Internet (ISP) que vigilen las comunicaciones de sus usuarios. Los ISP no tendrán alternativa.
  • Obstaculizará la noción de “uso justo” de material protegido por copyright (esto es, los materiales que se distribuyen con fines informativos, como demos, fragmentos de libros o artículos académicos, videos).
  • Criminalizará el uso compartido de archivos en línea a través de protocolos P2P (Peer to Peer).
  • Limitará el acceso a medicamentos de bajo costo en países en vías de desarrollo.

 

La vigilancia de todas las comunicaciones entre los usuarios de Internet es la amenaza más grande de ACTA

 

Neutralidad del Internet

Otro problema con ACTA es que considera el Internet como si fuera un país. Las leyes dentro de los países funcionan en distintos grados, apelan a tratados internacionales, pero el Internet es un terreno neutral de comunicación e interacción entre personas y organizaciones, independientemente de sus nacionalidades. Lo que ACTA haría será construir un marco legal que funcionaría como una frontera: si Internet fuera un país, ACTA sería su policía de aduanas.

El término remix no quiere decir solamente que un DJ mezcle una canción ya conocida, sino que sirve para ejemplificar el modo en que funciona la información en Internet. Por ejemplo, si alguien tiene un blog y quiere escribir sobre algún tema, las fuentes que utiliza para hacerlo se someten a un remix, a una mezcla nueva; esto aplica para periódicos, libros, música y todos los medios de comunicación imaginables. Utilizamos esa información para pensarla, analizarla y compartirla con otros. Así es como las grandes innovaciones en Internet han permitido el conocimiento compartido. Pero según ACTA, un simple blog, Tumblr o cuenta de Twitter que distribuya material protegido por copyright (como una nota periodística, por ejemplo), podría ser borrada arbitrariamente, sin informar al usuario.

 

El Internet no es ni bueno ni malo, es una herramienta cuya regulación debe tomar en cuenta a los usuarios

 

Sin intervención judicial, un usuario podría ser desconectado “permanentemente” de Internet, pues estaremos sometidos a un proceso de constante vigilancia por los ISP. Si se dan repetidas violaciones a lo que ellos consideran

los derechos de autor, las leyes nacionales de los países no podrán proteger a los usuarios, pues ACTA es, lo repetimos, un tratado internacional, cuya aplicación supersede a la de la legislación federal de un país. Según la nueva pirámide de las leyes, la única norma que se encuentra por encima de los tratados internacionales es la Constitución y esta solamente contempla las garantías individuales y los preceptos de organización del Estado, ya que la legislación federal cubre las conductas delictivas por materia y esfera de competencia. Este panorama puede parecer alarmista, y distintos voceros han mencionado que las últimas versiones de ACTA no contemplan este tipo de medidas, sin embargo queda como un referente del alcance de este tipo de políticas.

 

Por otra parte, el desconocimiento de los legisladores sobre el modo en que la información se genera y almacena en Internet es claro: por ejemplo, un usuario no podrá viajar con una laptop o un iPod si guarda en su disco duro canciones o películas descargadas desde Internet. Aún peor, los dispositivos que tengan reproductores o quemadores de DVD podrían ser registrados por personal de aduanas para asegurarse de que no almacenen material protegido por derechos de autor, aunque el material haya sido obtenido de manera legal. Según versiones filtradas de ACTA, esta ley permitiría que los dispositivos electrónicos fuesen confiscados o incluso destruidos por las autoridades, si se encuentra material protegido almacenado en ellos; además, los usuarios podrían enfrentar multas e incluso cargos de contrabando. La consecuencia más grave es que ACTA daría paso a un nuevo tipo de protección fronteriza, volviendo a toda agencia de protección de derechos de autor, virtualmente, una especie de policía del copyright.

El almacenamiento de información sería considerado robo, y su transporte sería considerado contrabando. ACTA pretende que la información sea tratada como propiedad privada. Por supuesto que hay algo de cierto en ello: sabemos que la piratería es un problema para las compañías e industrias, sobre todo en los ámbitos del entretenimiento, como la música, el cine y los videojuegos, pero ACTA criminalizaría a los usuarios, y es aquí donde las cosas comienzan a ponerse peligrosas.

 

¿A quién beneficia ACTA?

  • A las industrias de contenido. Mientras es más que loable que creadores y distribuidores ganen dinero por su trabajo, una manera de relacionarse con ese contenido es reproducirlo: piensen en los miles de tutoriales que existen en YouTube para aprender a tocar canciones en instrumentos musicales. Todo ello será cosa del pasado. Cómo las beneficia: les ayudará a tener mejor control de la distribución de sus productos y servicios y evitar la piratería. Cómo afecta a los usuarios: coartándolos para permitir distribuciones y prácticas de monopolio.
  • A propietarios de redes físicas, industrias telefónicas y proveedores de Internet. Cómo los beneficia: si el modelo “pay per view” para el contenido de televisión por cable fuese adoptado por los ISP, esto aumentará sus ganancias a través de la distribución de un contenido altamente filtrado y regulado. Cómo afecta a los usuarios: si todas las comunicaciones deben pasar por un filtro central, las comunicaciones entre usuarios serán cosa del pasado, pues siempre habrá un tercero observando.
  • A los Estados. El Internet entendido como un territorio permitirá una intervención más precisa del Estado. Obama ha considerado las negociaciones de ACTA como “asuntos de seguridad nacional” por esto mismo. Cómo los beneficia: los mecanismos que permiten compartir archivos entre usuarios podrán utilizarse para obtener información de esos mismos usuarios. Mientras que esto puede beneficiar para vigilar las comunicaciones de redes de piratería o delincuencia organizada, también supone graves abusos contra los derechos a la privacidad. Cómo afecta a los usuarios: esta misma vigilancia podría hacer que se rastrearan las fuentes informativas de los periodistas, que en muchos casos deben permanecer secretas por razones de seguridad. Aunque un usuario no tenga algo que ocultar en su computadora, las “búsquedas preventivas” suponen el regreso a prácticas invasivas de Estados totalitarios.

 

Los usuarios de Internet tenemos derechos y obligaciones. Es de vital importancia conocerlos

 

¿Qué hacer?

ACTA pretende ser una panacea, una solución mágica a todos los inconvenientes provocados por Internet para los esquemas tradicionales de autoría, derechos de autor y protección de propiedad intelectual. La lógica es que, de aprobarse, la piratería desaparecería mágicamente, pero las consecuencias serán verdaderamente graves. Las leyes de cada país serán intervenidas por un organismo internacional, en el cuál los ciudadanos no tendrán ningún tipo de participación y representación.

Si bien es cierto que tratados previos (como TRIPS, Tratado Relativo a Aspectos de Derechos sobre Propiedad Intelectual) no han mostrado claros avances para prevenir la piratería y sancionar el uso de material protegido, las soluciones deberían construirse gradualmente y siempre observando lo que es mejor para los usuarios. También nosotros estamos cambiando: las transacciones seguras en Internet son grandes incentivos para el consumo, pero también la retroalimentación entre usuarios de productos y servicios lo es. Lo importante es estar lo mejor informado posible y seguir paso a paso el desarrollo de estas cuestiones, que nos afectan a todos.

 

 

asi que en conclucion.

habra que suspender los servicios de internet.o bajar la velocidad solo para navegar .

lastima ahora si a muerto internet.

Link to comment
Share on other sites

yo disminuire la velocidad solamente ..ya que lo ocupo arto para las tareas de mis hijos..

o quisas busque la alternativa de buscar algo prepago...por que si la nueva era de la internet va a ser asii..ya no vale la pena tenerla...

es una lastima..

la internet cambio para peor....

Link to comment
Share on other sites

pero el solo hecho de buscar informacion en internet, como una tarea seria una "infraccion", en ese caso no serviria de nade tener internet

tienes razon.....entonc...a sacar la net y volver a buscar en la ya olvidada encarta o en los libros..

parece que sin internet no somos nada....

Link to comment
Share on other sites

lamentablemente para todos los que estudiamos carreras en redes esto nos da mas pega, pero repudio totalmente que los estados aprueben esta mierda de ley que lo unico que hacen es tratar a toda costa de conocer mas de nuestras vidas con el simple echo de abrir el navegador y lamentablemente ese conchetumadre de obama nos cago la libertad de expresion dejandonos de sombies, ni siquiera dejandonos dar nuestro punto de vista

 

si esta mierda de ley se aprueba a dejar a los isp en la ruina CTM

Link to comment
Share on other sites

pal copy loco ... no quiero que net muera , estos gobiernos de mierda defienden los intereses de las empresas grandes y se pasan por la raja la opinion publica , si aprueban acta o alguna ley similar el internet morira , nosotros hacemos el internet .. si no ahi gente dando vuelta por el compartiendo informacion y archivos no tiene ninguna gracia

Link to comment
Share on other sites

Create an account or sign in to comment

You need to be a member in order to leave a comment

Create an account

Sign up for a new account in our community. It's easy!

Register a new account

Sign in

Already have an account? Sign in here.

Sign In Now
×
×
  • Create New...